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Cepillarse los dientes

Placa bacteriana: ¿qué es y cómo controlarla?

La placa bacteriana es una de las causas principales de diversas enfermedades bucodentales, y uno de los factores influyentes en las complicaciones de tratamientos o intervenciones.

La boca, es una de las regiones por las que nuestro organismo se expone al medio que nos rodea. Es por esto, que se convierte en una especie de sistema ecológico abierto a todo tipo de bacterias que habitan alrededor. Todas las superficies que componen a la cavidad oral están expuestas a la acción de las bacterias. Es la saliva y el rozamiento de la lengua, los mecanismos que buscan reducir la acción de las bacterias dentro de la boca, tratando de establecer una especie de control propia del cuerpo.

Si querés saber qué es, cuáles son sus funciones, consecuencias y cómo controlarla, en este artículo te lo contamos. ¡Seguí leyendo!

¿Qué es la placa bacteriana?

La placa bacteriana es una película pegajosa e incolora, formada por gérmenes y bacterias dañinas para nuestra dentadura. Estos gérmenes y bacterias provienen de la boca, y la placa puede adherirse a cualquier tejido bucodental: dientes, encías, paladar, lengua, etc).

No es visible a simple vista, si no que es necesaria la aplicación de diversos químicos en el consultorio para revelar su cantidad y su extensión.

Funciones de la placa bacteriana

A pesar de ser causantes de algunas enfermedades, la placa bacteriana cumple funciones muy importantes para nuestra salud buco dental, por lo que lo importante no es eliminarla del todo, sino mantenerla controlada. Algunas de sus funciones son:

  • Protección del esmalte
  • Resistencia a la abrasión
  • Actúa como membrana semipermeable

Protege el esmalte

La existencia de una pequeña película en las piezas dentales, protege al esmalte de los dientes del desgaste producido por la acción masticatoria. Actúa como lubrificante.

Resiste a la abrasión

Los químicos utilizados para lavarnos los dientes presentes tanto en pastas dentales como en enjuagues bucales, entre otros productos, son altamente abrasivos. Es por eso que con los controles odontologicos adecuados, los especialistas suelen recomendarnos productos con diferentes acciones químicas. La placa, resiste a estos agentes abrasivos protegiendo la estructura y esmalte del diente, debido a su consistencia, se elimina mediante cepillos duros o piedras pómez.

Actúa como membrana semipermeable

La placa bacteriana actúa como una membrana semipermeable. Esto significa, que reduce la posibilidad de que las piezas dentales pierdan calcio y fosfato, a la vez que permite el paso de iones para reconstruir o reparar el esmalte dental.

Consecuencias de la placa bacteriana

Cuando algunos tipos de placa bacteriana se adhieren a los dientes, son uno de las causantes de la aparición de caries. Otras, sin embargo, se adhieren al tejido gingival y producen enfermedades en las encías como gingivitis o retracción de encías. Ambas problemáticas, sumadas a la falta de control sobre la placa bacteriana, puede causar la pérdida de las piezas dentales, y por ende, daños en la funcionalidad de nuestra dentadura.

Caries

La potencialidad de la placa bacteriana de producir caries, depende de su composición y de la cantidad de bacterias capaces de reducir el PH hasta niveles donde se pueda producir una desmineralización de los tejidos duros del diente.  

Gingivitis y retracción de encías

En el caso de las enfermedades gingivales, la placa bacteriana se adhiere al tejido de las encías y a los surcos gingivales, produciendo inflamación e incluso cambio en la composición de las encías. Puede concentrarse en una sola pieza dental, o puede derivar en una infección generalizada comprometiendo toda la encía del paciente.

¿Cómo controlar la placa bacteriana?

Al ser desencadenante de complicaciones en nuestra dentadura, lo más importante es poder controlarla. Nos parece fundamental aclarar que TODOS tenemos placa bacteriana adherida a las superficies de los tejidos de nuestra boca, pero con el control adecuado puede no generar complicaciones.

Dentro de las acciones que uno puede llevar a cabo para controlar la placa bacteriana se encuentran dos fundamentales: una buena higiene bucal y controles periódicos con un especialista. Estas dos soluciones, son interdependientes ya que es el odontólogo quien brindará las herramientas para un correcto cepillado y limpieza de los dientes, pero es el paciente quien deberá asumir la responsabilidad de realizarlo en tiempo y formas adecuadas.

¡Ya lo sabes! La placa bacteriana es perjudicial si no se controla, y puede afectar a tus piezas dentales. En Bisalud contamos con especialistas preparados para asesorate. ¡Si tenés dudas, comunicate con nosotros”

Fuentes

  • Poyato Ferrera, M. M., Segura-Egea, J. J., Ríos-Santos, J. V., & Bullon, P. (2001). La placa bacteriana: Conceptos básicos para el higienista bucodental. Periodoncia, 11 (2), 149-164. Disponible en [link]
  • Platt, C., Tosta, E., & Machado, M. E. (2004). Uso de los diferentes agentes químicos para el control de la placa bacteriana como coadyuvantes en la prevención de las enfermedades gingivales. Rev Odous Cient, 5(1). Disponible en [link]